El Pingyao Cheng Jia Hotel fue el hotel elegido en Pingyao. Un hotel tradicional situado en el interior de la muralla. La ubicación es muy buena, ya que está a la entrada de la muralla, por lo que si vienes en taxi como fue nuestro caso desde la estación de tren, puedes llegar caminando sin problemas en menos de 5 minutos.
Tuvimos dos habitaciones, una para la primera noche, muy pequeña y agobiante, donde casi no metemos las maletas, y otra mucho más amplia para la segunda noche. El problema es que hicimos las reservas por separado y nos dieron habitaciones diferentes.
Es un lugar tradicional, y sabiendo donde vas a dormir, el lugar tiene su encanto. Eso sí, prepara la espalda porque la cama es muy dura, al igual que en casi toda China.
En recepción solamente una persona hablaba inglés y si no estaba, lo llamaban por teléfono para ayudarnos.
En líneas generales, repetiríamos sin duda en este lugar, su precio por noche 17 euros.
En nuestro ranking, un 4 sobre 5.
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Cama |
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